Cali, junio 6 de 2025. Actualizado: viernes, junio 6, 2025 16:07
Más de un billón de pesos en 2024
Banca duplica inversión en seguridad digital
Por primera vez, la inversión de la banca colombiana en ciberseguridad supera el billón de pesos.
Inteligencia artificial, protección de datos y prevención de fraudes protagonizan el nuevo escudo digital del sistema financiero.
Cartagena, junio 5 de 2025. La transformación digital del sistema financiero colombiano avanza a pasos agigantados, y con ella crece también el compromiso del sector bancario por blindar sus operaciones frente a riesgos cibernéticos.
Así lo confirma el más reciente Informe de Gestión Gremial 2024, presentado por Asobancaria durante la edición 59 de la Convención Bancaria, en el que se reveló que las 38 entidades afiliadas duplicaron su inversión en seguridad digital durante el último año, alcanzando la histórica cifra de $1,07 billones, frente a los $543.000 millones registrados en 2023.
El crecimiento del 97% en este rubro no solo evidencia una mayor conciencia del sector frente al incremento de las amenazas digitales, sino también una decidida apuesta por la innovación tecnológica como eje de confianza y competitividad.
De acuerdo con el gremio, el 68,4% de las entidades bancarias aumentaron sus presupuestos en ciberseguridad, impulsadas por factores como la transformación digital, el ajuste por el índice de precios al consumidor y el fortalecimiento de sus capacidades operativas frente a nuevas tipologías de fraude.
Ciberseguridad como columna vertebral de la banca digital
El salto en inversión no ha sido gratuito.
En un entorno financiero cada vez más digitalizado, donde el acceso remoto y las transacciones en línea son la norma, la seguridad se convierte en el pilar estratégico para mantener la confianza del usuario y la estabilidad del sistema.
“La digitalización ha traído eficiencia, pero también mayores riesgos. Por eso, la banca ha reforzado su escudo tecnológico”, señalan desde Asobancaria.
Prueba de ello es la adopción casi universal de herramientas como la prevención de pérdida de datos (DLP) y el control contra ataques DDoS, presentes en el 94,7% de las entidades.
Además, el 42,1% de los bancos ya incorporan soluciones de inteligencia artificial, lo que permite una detección más rápida y predictiva de amenazas, así como una mejor gestión de eventos críticos.
El resultado es contundente: más de 32.558 millones de intentos de ciberataques fueron neutralizados durante 2024, y el 99,9% de las transacciones se realizaron sin fraude, según el informe.
De hecho, por cada $100.000 movilizados, solo $7 fueron objeto de reclamo por fraude, una cifra que ubica a Colombia como referente regional en ciberresiliencia bancaria.
Más personal, más mujeres y menos quejas
La seguridad digital no solo depende de la tecnología, también de las personas.
Las entidades afiliadas reportaron en total 152.452 colaboradores en áreas de seguridad, de los cuales el 59% son mujeres, una participación femenina que también se refleja en los órganos de decisión: la presencia de mujeres en juntas directivas pasó del 25% en 2023 al 30% en 2024.
Este fortalecimiento humano también se traduce en mejoras en la experiencia del usuario.
Uno de los indicadores más relevantes es el de quejas por operación: en 2024, se registraron solo 13 quejas por cada 100.000 transacciones, lo que representa una caída sustancial frente a años anteriores.
El gremio prevé que esta tendencia se mantendrá a la baja en 2025 gracias a una mejor gestión de reclamos y a estrategias de atención más centradas en el cliente.
Un blindaje frente al nuevo mapa de amenazas
La banca colombiana no actúa en el vacío.
A nivel global, el entorno financiero enfrenta una sofisticación creciente de ataques cibernéticos, muchos de ellos dirigidos a vulnerabilidades de terceros o cadenas de suministro digital.
En este contexto, la inversión proactiva en ciberseguridad no es solo una defensa interna, sino una respuesta coordinada frente a un riesgo sistémico.
“Hoy más que nunca, los bancos deben operar con estándares de seguridad que protejan tanto a los usuarios como a la infraestructura crítica del país”, afirman voceros de Asobancaria.
Para el gremio, la inversión en ciberseguridad no debe ser vista como un gasto, sino como una inversión estructural en confianza, base sobre la cual se construye cualquier ecosistema financiero sostenible.
Perspectiva 2025: más integración, más prevención
De cara al futuro, el sector espera consolidar su esquema de prevención y reacción frente a ciberamenazas, integrando aún más herramientas de analítica avanzada y automatización.
La implementación progresiva del sistema de pagos inmediatos Bre-B también impondrá nuevos retos, pues demandará interoperabilidad segura y experiencia de usuario optimizada.
En este nuevo contexto, Asobancaria promueve la actualización constante de protocolos, la colaboración con autoridades como la Superintendencia Financiera y la creación de alianzas público-privadas para fortalecer la ciberdefensa colectiva.
“El objetivo es claro: cero tolerancia al fraude y máxima eficiencia para el usuario”, concluye el informe.