Expectativa sobre la inflación en Colombia para 2025

Con la llegada del 2025, los economistas y analistas están atentos a los últimos datos del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de diciembre de 2024, ya que este es un indicador clave para las decisiones económicas del año.

Se espera que la inflación del mes de diciembre haya sido de un 0.37%, impulsada principalmente por aumentos en los costos de vivienda, servicios públicos, transporte y alimentos.

Según Carolina Monzón, Gerente de Investigaciones Económicas de Banco Itaú, uno de los principales factores que contribuiría a esta variación es el aumento en los arriendos, que podría seguir siendo uno de los elementos más relevantes en el ajuste de los precios de la canasta básica.

En particular, se espera que los arriendos aporten alrededor de 15 puntos básicos al índice de inflación, dado que este componente está más relacionado con el IPC que con el salario mínimo.

Sin embargo, la variación en los precios de los arriendos no es inmediata y depende de las fechas de renovación de los contratos.

En este sentido, es posible que algunos incrementos se reflejen ya en enero, pero el impacto total se distribuiría en el primer trimestre del 2025.

Otro factor relevante que podría incidir en la inflación en diciembre es el posible aumento en los precios energéticos, incluidos los costos del gas y la electricidad.

La variación en los precios de los servicios públicos podría generar un ajuste adicional en los costos de vida, afectando a la inflación de forma significativa en los hogares colombianos.

Además, el componente de restaurantes y hoteles podría aportar alrededor de 5 puntos básicos a la inflación, debido a los ajustes típicos que se dan durante la temporada de celebraciones, mientras que el componente de alimentos podría aportar 6 puntos básicos.

En cuanto al transporte, se prevé que los precios de los tiquetes de transporte terrestre y aéreo, así como el impacto de los peajes, añadan aproximadamente 4 puntos básicos al índice de inflación.

Aunque se espera que el aumento en los peajes no tenga un impacto muy fuerte en el IPC, las variaciones moderadas en este componente podrían seguir afectando los costos de transporte y, por ende, los precios generales de la canasta familiar.

Con estas proyecciones, el cierre de la inflación anual en 2024 podría situarse en un 5.10%, lo que representa una mejora considerable respecto al 9.3% registrado en 2023, aunque aún se mantiene por encima de los niveles deseados por el Banco de la República.

El año 2025, sin embargo, presenta nuevos retos, ya que la inflación de enero estará influenciada por varios factores, entre ellos, el ajuste en el salario mínimo y los incrementos en los costos del transporte público, gasolina, diésel y peajes, que podrían generar presiones adicionales sobre los precios.

El salario mínimo, que se espera que experimente un aumento en enero, tendrá un impacto directo en varios sectores, como los restaurantes, hoteles y el sector salud, donde se podrían generar variaciones de precios importantes.

Sin embargo, el impacto sobre la inflación general podría ser moderado en los primeros meses del año.

Según los analistas, si bien el primer trimestre del 2025 podría presentar ajustes alcistas, la expectativa es que la inflación se mantenga más estable en comparación con 2024, gracias a una posible desaceleración en la velocidad de los incrementos en los precios.

Aunque se espera que la inflación continúe moderándose durante 2025, factores como el ajuste en los arriendos, el incremento en los precios de la energía, el transporte y el impacto del salario mínimo podrían generar algunas tensiones en los precios durante los primeros meses del año.

La clave estará en cómo evolucionan estos factores y si el proceso de desinflación logrado en 2024 se mantiene durante el primer trimestre de 2025.

Los hogares colombianos deberán seguir atentos a estos cambios que afectarán sus presupuestos y decisiones de consumo a lo largo del año.

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