Cali, octubre 22 de 2025. Actualizado: martes, octubre 21, 2025 23:32
Medicina y salud emocional
El “efecto Rumpelstiltskin”: cuando poner nombre a la enfermedad alivia el malestar
Un antiguo cuento de los hermanos Grimm inspiró a investigadores del Real Colegio de Psiquiatría del Reino Unido para bautizar un fenómeno con resonancias clínicas: el “efecto Rumpelstiltskin”.
En la fábula, descubrir el nombre oculto del duende permite liberar a la joven de un compromiso imposible; en medicina, conocer el diagnóstico otorgaría un alivio similar.
En un artículo publicado en la revista BJPsych Bulletin, los autores definen este efecto como el valor terapéutico inherente a otorgar “nombre y apellidos” a un problema de salud.
Señalan que, más allá de guiar un tratamiento, el mero acto diagnóstico genera validación, empoderamiento y reducción de la ansiedad que provoca la incertidumbre.
Estudios previos ya avalan esta idea. Una revisión de 2021 constató que las etiquetas diagnósticas contribuyen a facilitar la comunicación, mejorar la autocomprensión y fomentar vínculos con grupos de apoyo.
Otro análisis, centrado en jóvenes con trastornos psiquiátricos, confirmó que el respaldo de la autoridad científica alivia la autoculpa y favorece la aceptación social.
La fuerza de la etiqueta diagnóstica
Según los investigadores, el diagnóstico no es solo una categoría médica, sino una herramienta social que ayuda a construir una narrativa sobre el sufrimiento.
Nombrar una afección elimina lo que la filósofa Miranda Fricker denomina “oscuridad hermenéutica” y permite dejar de interpretarla como una carencia personal.
Además, vincula al paciente con comunidades de apoyo y despierta la esperanza asociada al inicio de un posible tratamiento.
No obstante, advierten los autores, la etiqueta diagnóstica también puede desencadenar estigma, miedo o convertirse en “profecía autocumplida” si el beneficio esperado no se materializa.
Por ello, subrayan la necesidad de personalizar la comunicación del diagnóstico y acompañar al paciente más allá de la etiqueta, para que ésta no se convierta en una carga irreversible.