Cali, mayo 9 de 2025. Actualizado: jueves, mayo 8, 2025 23:18
Curiosidades sobre el nombre del papa
¿Qué es el nombre papal y cómo se elige?
Cuando se acerca la elección de un nuevo papa, muchas preguntas surgen entre los fieles y curiosos del mundo, siendo una de las más comunes el porqué el papa cambia de nombre, por lo que hoy le contamos qué es el nombre papal y el origen de esta tradición que esconde historia, simbolismos y significados.
¿Qué es el nombre papal?
El nombre papal es el nombre que adopta el nuevo papa tras su elección en el cónclave, lo cual es una práctica que forma parte de las tradiciones del Vaticano y distingue la figura del papa del resto de los cardenales.
Así pues, este nombre no solo representa la identidad religiosa del sumo pontífice, sino que también refleja su visión, sus valores y, a veces, el legado que desea honrar.
Por ejemplo, el fallecido papa Francisco se llamó con el nombre común de Jorge Mario Bergoglio antes de asumir el cargo.
Sin embargo, al ser elegido, escogió el nombre “Francisco” en honor a San Francisco de Asís, símbolo de humildad y amor por los pobres.
¿Cómo se elige el nombre papal?
La elección del nombre papal es una decisión totalmente personal del cardenal que acaba de ser elegido como papa.
No existe un reglamento escrito ni un proceso obligatorio, pero generalmente los cardenales seleccionan un nombre que tenga un significado profundo para ellos.
El nuevo papa puede inspirarse en un santo al que admire, como el caso de Francisco o de Joseph Ratzinger, más conocido como Benedicto XVI, el cual tomó el nombre en honor a San Benito, fundador de la orden benedictina, y a Benedicto XV, papa pacificador durante la Primera Guerra Mundial.
También puede ser un papa anterior que admire o quiera honrar, caso anterior; al igual que un ideal que quiera reflejar durante su papado (como la paz, la reforma, la humildad).
El primer papa en combinar dos nombres fue Albino Luciani, en 1978, llamándose Juan Pablo I. Otro sumo pontífice que siguió esta tradición fue Juan Pablo II, que eligió su nombre combinando los de sus dos predecesores inmediatos, Juan XXIII y Pablo VI, como símbolo de continuidad.
📌Puede ver: Conozca cómo se elige al sucesor del papa
¿Cuál es el origen de esta tradición?
El primer papa conocido en cambiar su nombre fue Juan II, en el año 533. Su nombre de nacimiento era Mercurio, en honor al dios romano, algo que se consideraba inapropiado para un líder cristiano.
Desde ese momento, la tradición comenzó a afianzarse y desde el siglo X casi todos los papas adoptaron un nuevo nombre al momento de asumir el cargo.
Es una forma de señalar que, a partir de ese momento, dejan atrás su identidad personal para asumir una misión universal como líder espiritual de la Iglesia Católica.
¿Cuántos papas ha habido?
Hasta hoy, la Iglesia Católica ha tenido 266 papas a lo largo de más de dos mil años de historia. Aunque los primeros papas usaban su propio nombre, desde hace más de mil años todos han adoptado un nombre papal al asumir el cargo.
Este nuevo nombre es el que queda registrado en los documentos oficiales, en la historia del Vaticano y en la memoria de los fieles. El nombre común del cardenal prácticamente desaparece del uso público, quedando solo como dato biográfico.
¿Cuál es la diferencia entre el nombre papal y el nombre común?
La diferencia principal está en el simbolismo y el propósito. Dicho de otra forma, el nombre común es el que acompaña al cardenal durante su vida personal y eclesiástica.
No obstante, el nombre papal es el que marca su identidad como líder supremo de la Iglesia Católica, y es el que quedará grabado en la historia.
En ese orden de ideas, nadie recordaba al papa Francisco como Jorge Mario Bergoglio; el mundo entero lo conocía como Francisco.
Curiosidades sobre los nombres papales
- Los nombres más usados han sido Juan (23 veces), Gregorio (16 veces), Benedicto (16 veces) y Clemente (14 veces).
- Ningún papa ha elegido todavía llamarse Pedro II, por respeto al apóstol Pedro, considerado el primer papa.
- Ningún papa ha usado el nombre de Jesús por respeto a Cristo, ni tampoco el nombre de María, en honor a la Virgen.
- El nuevo nombre puede influir en la percepción pública del papado: nombres humildes evocan cercanía, mientras que nombres históricos evocan tradición y continuidad.
- Los papas suelen anunciar su nombre inmediatamente después de ser elegidos.
- Hay nombres prohibidos tácitamente.
Así que, cuando se vea salir el humo blanco de la Capilla Sixtina y se anuncie el Habemus Papam, ya se sabrá que el nombre que se pronuncie no es solo un título: es todo un símbolo cargado de historia, fe y misión.